No podemos olvidar que somos los
herederos de la tradición cultural más respetable y grandiosa de la historia de
la humanidad. Roma creó el más importante
imperio en la historia antigua e hizo aportaciones decisivas a la civilización
occidental. La cultura latina clásica es, sin duda, la que le da a
Occidente una mayor impronta y configuración. A partir del edificio cultural,
social, político y legal romano se desarrolló la unidad posterior que
llamaremos Occidente.
El
legado de la Roma antigua es un elemento esencial que ha contribuido a formar
algunos de los aspectos más significativos de nuestra cultura y civilización europea.
La “romanidad” es en muchos sentidos humana y “moderna” y nos habla a través de
los siglos. Los escritos de sus filósofos (Cicerón, Horacio, Séneca,…) se han
convertidos en uno de los mejores educadores de Europa.
Es
difícil hablar de los valores de una cultura que se prolongó tan extensamente
en el tiempo y en el mundo conocido de su época. Sin embargo, podemos destacar
que los romanos siempre miraron con respeto y nostalgia aquellos valores que
desarrollaron en sus primeras etapas a un nivel familiar y político y que los
diferenciaban de otros pueblos dándoles una supremacía y un lugar o destino
único en la historia de la Humanidad.
Las virtudes romanas son una serie de valores estimados en
la Antigua
Roma como fundamentales para todos los ciudadanos. Son cualidades
de vida a las que todos los romanos deberían aspirar. Para muchos historiadores fueron estas cualidades las que dieron a la República Romana la fuerza moral necesaria para conquistar y civilizar el mundo. Muchas de estas virtudes o cualidades fueron asociadas a la
mitología y representadas por dioses.
Esta mentalidad
romana es la mentalidad del campesino-soldado, de los primeros habitantes de
Roma (mores maiorum). Sus virtudes son la honradez y la frugalidad, la
previsión y la paciencia, el esfuerzo, la tenacidad y el valor, la
independencia, la sencillez y la humildad frente a todo lo que es más poderoso. Esta mentalidad revela un gran
conservadurismo, pero a la vez supone una referencia para la sociedad en cuanto
a sus valores sociales o morales.
Estos primeros
romanos, campesinos y soldados, herederos de austeras costumbres y fieles a su
religión familiar desarrollaron una serie de virtudes que siguieron siendo
modelo propiamente romano por siglos. Estas son las cualidades de vida, a las que todos los ciudadanos romanos deberían aspirar.
VIRTUDES
PERSONALES
· Auctoritas: "Autoridad
Espiritual". El sentido de la función social de alguien, construida a
través de la experiencia.
· Clementia:"Indulgencia",
suavidad, humanidad y benignidad con todo lo humano.
· Gravitas: “Elevación espiritual”. El sentido de la importancia de un asunto, responsabilidad,
seriedad y determinación. La responsabilidad, el
empeño, la buena fe con aquello que se tiene entre
manos, resultaba fundamental para el
ser romano.
· Dignitas: "Dignidad". Un sentido de autoestima, orgullo propio y prestancia personal.
· Firmitas: "Tenacidad". Firmeza espiritual y perseverancia para la consecución de los propósitos.
Fuerza
mental, habilidad de defender una propuesta.
· Frugalitas: “Sobriedad”. Templanza, moderación y simplicidad en el estilo
de vida, sin llegar a ser miserable.
· Honestas: "Honestidad", honra, honor, reputación; la imagen que uno muestra
en cuanto a miembro respetable de la sociedad.
· Humanitas: "Humanidad". aquello que
corresponde a la naturaleza y al sentimiento humano, a su formación, cultura,
civilidad y refinamiento.
· Industria: “Diligencia”. Trabajo duro", aplicación, celo y esfuerzo en el trabajo.
· Pietas: "Observación de los deberes". Respeto por el orden natural,
social, político y religioso. Es
decir, el reconocimiento de estar vinculado y subordinado a algo superior, en
primer lugar lo divino, pero también a realidades humanas. Incluye las ideas de patriotismo,
devoción y afecto por los demás.
· Prudentia: "Prudencia".
Previsión, sabiduría y discreción personal.
· Severitas: "Severidad". Autocontrol. Contención,
gravedad, auto control, formalidad. Incluye también la idea de austeridad y
sobriedad.
· Veritas: "Franqueza". Honestidad en relación con
los demásd.
Virtudes
públicas
Además
de las virtudes personales, aspiración de todo individuo,
la cultura romana también defendía virtudes en
común que deberían ser compartidas por toda la sociedad. Además, algunas de las
virtudes que los individuos deberían aspirar también son virtudes públicas,
seguidas asimismo por la sociedad como un todo. En diversos casos, las virtudes se
personificaban en divinidades.
· Abundancia: "Abundancia, Plenitud". El ideal de tener comida y
prosperidad suficientes para todos los segmentos de la sociedad.
· Aequitas: "Igualdad". Justicia e igualdad tanto dentro del gobierno como entre las personas
· Clementia: "Clemencia". Merced, mostrada al resto de naciones.
· Concordia: "Concordia". Armonía entre el pueblo romano, y también
entre Roma y las otras naciones.
· Felicitas: "Felicidad, Prosperidad". Una celebración de los mejores
aspectos de la sociedad romana.
· Fortuna: "Fortuna,
Suerte". Un agradecimiento a los acontecimientos positivos.
· Iusticia: "Justicia". Expresada por leyes y
gobiernos sensatos.
· Laetitia: "Contentamiento, felicidad". Celebración del
agradecimiento, generalmente por la solución de crisis.
· Liberalitas: "Liberalidad". Dar generosamente.
· Nobilitas: "Nobleza".
Acciones nobles dentro de la esfera pública.
· Patientia: "Paciencia". La habilidad necesaria en momentos de tempestad
y crisis.
· Pax: "Paz". Una celebración de paz dentro
de la sociedad y entre las naciones.
· Providentia: "Providencia". La habilidad de la sociedad romana de
sobrevivir a desafíos y manifestar un gran destino.
· Pudicitia: "Modestia". Una expresión pública contra la acusación de
"corrupción moral" de la Roma Antigua.
· Salus: "Salud". Preocupación con el bienestar y la salud pública.
· Securitas: "Seguridad". Gobierno eficiente que lleve a la paz.
· Spes: "Esperanza". Especialmente en tiempos
de dificultades.
· Virtus: "Coraje". Especialmente de los líderes de la sociedad y del gobierno. Desempeñó uno más importantes papeles
dentro de la vida política romana
Hoy día, todos estos valores morales siguen
siendo la base para que podamos medir nuestro comportamiento, para
ulteriormente entenderlas mejor y practicarlas en nuestra vida cotidiana En este sentido los autores clásicos nos pueden
proporcionar un material precioso en nuestro propósito educativo de formar al
joven y de darle algunas pautas útiles para su vida pública y privada. Y parece que esta perenne potencialidad
de los clásicos en muchas ocasiones ha pasado
desapercibida.